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Los contratiempos en la vida son inevitables, pero puedes optar por verlos como lecciones positivas en lugar de fracasos desagradables. Descubre formas para lidiar con los contratiempos y obstáculos para poder avanzar y alcanzar tus objetivos.

Thomas Edison pasó por miles de fracasos antes de que su bombilla funcionara como él quería. Edison tenía una visión muy positiva del fracaso, y su frase célebre fue: “Yo no fracasé. Solo encontré 10,000 formas que no funcionan”. La sociedad se centra en su logro y, por eso, se considera el mejor inventor de Estados Unidos.    

Sin embargo, nos resulta mucho más difícil no ser tan duros con nosotros mismos que con las figuras históricas. Si aprendemos cómo lidiar con los contratiempos de forma correcta, podemos convertir nuestros fracasos en logros.

Estas son algunas recomendaciones para superar el fracaso:

NO te obsesiones con errores del pasado

Las investigaciones sugieren que cuando nos obsesionamos con nuestros supuestos fracasos, solo nos deprimimos más. No tienes tiempo para castigarte cuando deberías estar buscando la manera de seguir adelante. Así que perdónate y sigue adelante antes de caer en el abismo de la desesperación.  

CÉNTRATE en los objetivos futuros

Puede que no queramos obsesionarnos con nuestros fracasos, pero eso no significa que no sirvan para algo. Un pequeño contratiempo puede motivarnos a arriesgarnos y esforzarnos más cuando queremos alcanzar un logro a largo plazo. Si tu objetivo era escalar una montaña pero no llegaste a la cima, aún aprendes algo pese a ello y te vuelves así más fuerte para la siguiente escalada. La próxima vez tendrás más motivación que nunca de llegar a la cima.

NO evites las cosas

Con la palabra “fracaso” ya adoptamos una actitud equívoca cuando nos enfrentamos a retos. Los estudios demuestran que cuando tenemos una mentalidad de “todo vale, menos fracasar”, tenemos miedo de admitir pequeñas derrotas, aprender de ellas y pasar al siguiente reto. En cambio, nos enfadamos y nos preocupamos y dedicamos mucho tiempo a esquivar el fracaso, tanto que parece imposible descartar un plan malo y cambiar el rumbo. Intenta utilizar palabras como “pequeño contratiempo”. 

BUSCA siempre

En lugar de pensar “intentaré no fallar”, haz que tu mantra sea “buscaré el éxito”. Cuando nos centramos en posibles logros, estamos más dispuestos a fracasar rápidamente y a experimentar con nuevas estrategias, que es exactamente lo que debemos hacer. Y, como otro punto más a favor, las investigaciones demuestran que nos hace más felices y nos estresa menos. 

NO te aferres

Los pequeños contratiempos son una cosa, pero hay ocasiones en que debes admitir que tu plan no funciona. Puede ser peligroso insistir en un plan malo solo porque no quieres sentir que todo tu esfuerzo hasta el momento ha sido en vano. Escalar una montaña es un buen objetivo, pero la mayoría de las bajas en el Everest se producen cerca de la cima. A veces, es mejor volver antes de que sea demasiado tarde. Incluso si no se trata de vida o muerte, aún podría ser un plan malo que no vale la pena. 

ADÁPTATE rápido

Se siente mal descartar un plan que no funcionaba, pero cuanto antes lo hagas, menos tiempo perderás. Estamos programados para resistirnos a admitir una derrota, así que intenta replantearte tus contratiempos simplemente como experimentos fallidos, como Edison y sus bombillas. El número de intentos no es lo que importa. Siempre que te adaptes, aprendas y seas constante, tu luz terminará por brillar. 

Esto es lo que hicieron Edison y otros grandes pensadores, y su actitud no es una reliquia del pasado: Elon Musk, un Edison moderno, sufrió retrasos en la comercialización de sus vehículos eléctricos y sus cohetes SpaceX han explotado en la plataforma de lanzamiento. Él dice: “Si las cosas no salen mal, no estás innovando lo suficiente”. Y él es el hombre que lanzó un Tesla hacia Marte. 

Ve tu vida como un laboratorio donde no hay fracasos, sino contratiempos que enseñan qué no hacer para poder intentarlo de nuevo.